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El instante crucial del partido se produjo justo antes del descanso, cuando Bruno Fernandes recibió una tarjeta roja tras un desafortunado tackle a la altura de la rodilla sobre James Maddison. En sus declaraciones posteriores al encuentro, Ten Hag se mostró defensivo, afirmando: "Comenzamos muy mal. La tarjeta roja cambió todo, ya que estábamos 1-0, pero ahora estamos con diez y eso complica las cosas" [Jacob Leeks, The Mirror]. En contraste, el exdefensor del United, Gary Neville, no escatimó críticas, calificando la actuación del equipo en la primera parte como "una absoluta vergüenza" [Ben Stewart, Planet Football], subrayando que el equipo ya mostraba grandes deficiencias incluso antes de la expulsión. La controversia generada por la decisión arbitral ha polarizado a los seguidores, quienes se dividen entre considerar la medida como excesiva y aquellos que opinan que refleja el caos que envuelve al conjunto de United.
Los comentarios de Chris Sutton se alinearon con esta perspectiva, al señalar que la derrota evidenciaba una cadena de malas actuaciones, indicando: "Qarabag le dio a Tottenham un mejor partido el jueves por la noche que Manchester United hoy" [Jacob Leeks, The Mirror]. Esta afirmación subraya la frustración respecto a la falta de disciplina y enfoque del equipo, sugiriendo que la tarjeta roja no es más que un síntoma de problemas más profundos que afectan al plantel.
En las semanas venideras, las consecuencias de la expulsión de Fernandes se dejarán sentir, ya que se perderá partidos cruciales contra Aston Villa y Brentford. La carencia de un líder y generador de juego en esos encuentros plantea interrogantes urgentes sobre cómo United afrontará los desafíos que se avecinan, mientras lucha por recuperar su posición en lo que se ha convertido en una temporada tumultuosa.
Otro problema evidente que se destacó durante el partido fue la alarmante falta de identidad del Manchester United en el terreno de juego. Jamie Redknapp observó que el equipo exhibió "ninguna confianza, ninguna identidad" [BreakingNews.ie], un patrón que se ha vuelto recurrente bajo la dirección de Ten Hag. Agregó: "Están en la parte baja de la tabla y no veo hacia dónde pueden ir desde aquí" [Irish Independent], señalando una desconexión significativa dentro del plantel. Esta percepción fue respaldada por Paul Scholes, quien lamentó la confusión visible entre los jugadores en cuanto a sus roles y responsabilidades, afirmando: "Se ven sin entrenamiento, algunas de las posiciones que toman... es simplemente una locura las posiciones que a veces ocupan en el campo."
Asimismo, la organización defensiva del equipo parecía inexistente, con el Tottenham aprovechando al máximo las brechas y debilidades que persistieron a lo largo del encuentro. El primer gol, anotado por Brennan Johnson, ejemplificó esta deficiencia, ya que el avance sin oposición de Micky van de Ven desde el medio campo del United reveló una falta de disciplina entre los defensores. Como observó Richard Jolly: "United es especialista en transición... siguen en transición", sugiriendo que los problemas tácticos han persistido a pesar de la considerable inversión en nuevos jugadores.
A la luz de esta crítica, la capacidad de Ten Hag para establecer un estilo de juego cohesionado está ahora bajo un intenso escrutinio. Dada la aspiración del club de recuperar su estatus entre la élite del fútbol inglés, la trayectoria actual plantea serias preocupaciones sobre el futuro tanto del entrenador como del equipo.
Tras la derrota ante el Tottenham, la presión sobre Ten Hag ha aumentado considerablemente. El equipo actualmente ocupa el 12º lugar, habiendo perdido tres de sus primeros seis partidos de liga. Robbie Savage enfatizó la urgencia de la situación al afirmar: "tienen que tomar una gran decisión esta semana" [CaughtOffside], insinuando que el club podría estar considerando un cambio de entrenador. Tras inversiones significativas en el mercado de fichajes, los aficionados se muestran cada vez más inquietos, expresando sus frustraciones tanto en las gradas como en las redes sociales.
A medida que se acercan partidos más difíciles contra Porto y Aston Villa, el foco estará firmemente en Ten Hag para proporcionar resultados tangibles. Si no logra revertir pronto la situación, los cánticos de "Te van a despedir por la mañana" [Kieran Davies, The Sun] de los aficionados rivales podrían convertirse en una sombría realidad para el agobiado entrenador. Como advirtió Neville: "La bola de nieve comienza a rodar colina abajo y va adquiriendo velocidad" [Oli Gamp, The Mirror], sugiriendo que, sin mejoras inmediatas, el tiempo de Ten Hag en Old Trafford podría estar llegando a su fin.
En conclusión, la derrota ante el Tottenham ha puesto de manifiesto varios problemas apremiantes que aquejan al Manchester United, que van desde fallos disciplinarios hasta una falta de coherencia táctica. A medida que el equipo avanza, serán imperativos cambios sustanciales para evitar más humillaciones y restaurar la confianza entre los jugadores y los aficionados por igual. Las próximas semanas serán cruciales para Erik ten Hag y su plantel mientras se esfuerzan por recuperar su posición en una desafiante campaña de Premier League.